ARTETERAPIA ¿CÓMO SE TRABAJAN LAS EMOCIONES?
ARTETERAPIA ¿CÓMO SE TRABAJAN LAS EMOCIONES?
Por Karen Arredondo
Si exploramos nuestros niveles de emoción más profundos, observamos que éstos frecuentemente son defendidos y guardados en el inconsciente. Es muy difícil acceder a esas emociones, lo que provoca sensaciones de desesperanza o conflictos internos, porque éstas siempre buscan una u otra forma de salir, son muy intensas y muchas veces dominan aspectos de nuestras vidas. El arteterapia ayuda a conocer estas emociones bloqueadas a nivel inconsciente, favoreciendo con ello la toma de conciencia y una mejora sustancial a nivel de autoconocimiento, teniendo la opción de dar una salida útil, mejorar y transformar nuestra experiencia vital y con ello nuestras relaciones.
La ventaja que tiene la arteterapia, en una intervención a nivel familiar, es ofrecer una posibilidad de comunicación alternativa a la verbal: el lenguaje artístico. Permitiendo así abordar un problema de manera tal que su solución se manifieste a nivel visual, propiciando una mejor comprensión de la dificultad.
La relación familiar en Arteterapia se trabaja a partir de entender todo lo que la persona trae consigo a la terapia: sus experiencias con la madre y cómo se ha dado la conformación de su personalidad. Esto dependió en gran medida de dos factores, el factor innato: el grado de tolerancia o intolerancia del bebé a la frustración; y el factor ambiental: la capacidad de revêrie de la madre, que es la respuesta de ella frente a las necesidades y demandas del bebé . Esta relación es como un espejo, el bebé mirando el rostro de su madre aprende a conocerse a sí mismo. Así, gracias a la respuesta de la madre, el bebé puede ir recibiendo sucesivas buenas experiencias de su relación con ella. En su interior guarda la vivencia de una madre receptiva, capaz de contener y a la vez metabolizar sus ansiedades. Con ello establece también su relación con los otros, su experiencia vital, a través de una confianza básica en el mundo.
El rol del arte terapeuta se sustenta y toma especial sentido al reparar esa confianza básica que puede haber sido alterada en la persona, en su primera etapa de vida. En su rol es esencial sostener, contener, alcanzar, creer, retener, conservar todo aquello que la persona trae a la terapia. El arte terapeuta está encargado de proveer, en la medida de lo posible, la confianza básica de la persona. Esta función reparadora –nunca acabada- permite a la persona poder manejarse mejor con su realidad interna y externa, con sus emociones y las circunstancias de la vida.
La contención a lo largo del tratamiento proporciona un modelo para el paciente, que muestra que lo que en un principio parecía intolerable puede ser tolerado, lo que era confusión puede ser comprendido, y la desesperación da paso a la confianza
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